Una vez más el Karate Do se ha quedado fuera del corte a las primeras de cambio. Una vez más no estará presente en unos Juegos olímpicos, una vez más no será retransmitido por todas las televisiones alrededor del mundo, una vez más catorce personas politizadas han decidido que no lo merece...Una vez más el Karate Do sigue su camino, y sigue siendo un Arte Marcial, no un deporte.
Tras la decepción inicial comienza el análisis posterior: "¿Es bueno que un Arte Marcial se "deportivice? "
Desde luego que existen muchos, pero que muchos pros. Sin embargo existen unos pocos peros, pero de mucho peso.
Todos los que seguimos las Artes Marciales en general, vemos como aquéllas disciplinas que ahora mismo forman parte de los Juegos Olímpicos como el Judo y el Taekwondo, han sufrido un cambio y una transformación interna.
La pregunta es: ¿Se puede considerar esta transformación como una evolución?
Efectivamente una transformación puede ser una evolución, pero debemos dilucidar si esta evolución es positiva o no. Cualquier evolución significa que se ha producido un cambio, una modificación, y éste cambio puede ser muy agresivo, hasta tal punto de segregar una disciplina.
En el momento en que un Arte Marcial entra a formar parte de los Juegos Olímpicos, algunas personas decidirán qué cambios deberán hacerse para hacerlo más llamativo, más visual, más "deportivizado". Sufrirá cambios en su reglamentación, en la vestimenta...en un montón de cosas.
Pero, ¿Se está preparado para pagar un precio así de alto? Y además ¿Ésto no significa perder, en general, ese Do del que tanto se habla?¿Es preferible ser conservador y tradicional, como lleva existiendo y superviviendo tantísimos años o incorporarse a las nuevas tendencias? Y además ¿Para qué este cambio, para que sea retransmitido una vez cada cuatro años y la gente vaya corriendo a apuntarse a un Dojo/Gimnasio porque es el deporte-moda de turno?
Está claro que el Karate lo conoce todo el mundo. Sin embargo este efecto llamada trae consigo nuevas licencias, dinero fresco para las agonizantes federaciones con el que poder realizar cursos, comprar material, poder realizar competiciones, comprar trofeos, realizar exámenes...todo aquéllo que cada vez más se deja de la mano de iniciativa privada, llámese interclubes, quienes reciben una pequeña subvención pero desempeñan todo el trabajo y esfuerzo.
En fin, como veis, existen partidarios y detractores sobre el asunto que nos ocupa. Solamente hemos dejado unas pinceladas con unas cuantas preguntas para poner la mente en funcionamiento.
¿Y tú, qué opinas?
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