Entrenamiento y curso de tecnificación de monitores

Ayer sábado nos desplazamos hasta el Centro de Tecnificación de Judo en Villaviciosa de Odón para participar en el entrenamiento que tuvo lugar desde las 10 hasta las 12 horas.
Se inició el calentamiento conjúntamente con los judokas, que tuvo una mayor parte de Ne Waza (suelo) con distintos ejercicios.
Después, los jiujitsukas nos agrupamos y realizamos un pequeño calentamiento con ejercicios más específicos. Varias técnicas de encadenamiento de puño y pierna para ir cogiendo movilidad.
A continuación se hicieron grupos de tres y comenzamos por combates de puño-pierna, luego proyección, luego suelo y por último tipo competición (con las tres partes).
Al ser grupos de tres, uno descansa hasta que acaba el combate de sus compañeros. En el cambio, entra él y sale otro a descansar, turnándose para ir cogiendo aire y reponer fuerzas.
Cuando terminaron las dos horas y mientras realizábamos unos estiramientos, Paco Luis, el médico de la fede, estuvo aconsejando a los deportistas que viajarán a Colombia (Cali) en el próximo Mundial de jiu jitsu, sobre cómo ir variando las horas de acostarse para llegar allí con el ritmo de vida más idóneo y que no repercuta en su descanso antes de la competición.
Cuando se marcharon nuestros compañeros (o Eusebio les invitó a que se fueran , porque no tenían mucha prisa) comenzamos la última parte del curso de tecnificación de monitores de jiu jitsu, que por problemas de agenda no pudo realizarse en julio.
Desde las 12 hasta las 14 horas nos centramos en partes como atemis, defensas,controles y proyecciones.
Después de comer y un pequeño descanso para intentar recomponer nuestro cuerpo, comenzamos con la explicación de juegos, con la que volvimos a entrar en calor otra vez.
A continuación hicimos la parte de katas y Ne Waza (suelo). En este punto, aparte de los ejercicios y correspondientes explicaciones de las técnicas, terminamos la jornada con la explicación por parte de Eusebio del nuevo sistema de competición de jiu jitsu, sólo de suelo. Realizamos varios randoris con las normas de este sistema para ir valorando sobre el terreno la forma de trabajar que conlleva, y cambiamos de compañero para realizar otros cuantos randoris.
Al final del día, con muestras de bastante cansancio, nos fuimos cada uno a nuestra casa a descansar las agujetas (un día entero de tatami desgasta a cualquiera). con la sensación particular de que el trabajo estaba bien hecho.